Celine Maison de Couture

La Maison Francesa fue fundada por Madame Céline al comienzo de la II Guerra Mundial como firma de zapatos para niños, en el número 52 de la rue de Malte de París, pero la marca evolucionó rápidamente hacia un prêt-à-porter hecho por y para la vida real.

En la década de los 60, creó su primera artículos de piel y accesorios, en ese momento Céline comenzó a defender la idea de la elegancia parisina a través de los pilares de la Maison: el savoir-faire y el uso de materiales de la mejor calidad.

Tras la muerte de su fundadora, casi 60 años después el grupo LVMH adquirió la firma y la puso en manos del diseñador Michael Kors, encargado de rejuvenecer la Maison, la quintaesencia  del chic parisino.

Tras la salida de Michael Kors, cogió la batuta la diseñadora croata Ivana Omazic. “Madame Céline fundó la firma con una filosofía innovadora que ella misma denominó Couture Sportwear. Yo he querido respetarlo y recuperar así las raíces femeninas de Céline, adaptándolas a la mujer de hoy”, decía a Vogue España, en diciembre de 2005.

Finalmente, en el año 2007, la aclamada Phoebe Philo volvió al mundo de la moda tras tres años asumiendo las riendas de la creación de la firma, debutando al frente de Céline con una colección que Vogue califica como “genial austeria senual y necesaria” inmediatamente, la Maison se situó entre las primeras posiciones de las listas de expertos en moda del mundo.

Con la llegada de Phoebe Philo los diseños atemporales y básicos de armario tuvieron una repercusión inminente. Piezas clásicas, prácticas y muy depuradas se impusieron como tendencia y llenaron los escaparates de todas las multinacionales con sus reinterpretaciones.

En 2017, Phoebe Philo abandona Céline dejando un trabajo impecable y una firma exquisita y reconocida internacionalmente. Se cierra así el capítulo más clave de la Maison tras diez años de éxitos y reconocimiento mundial. 

Hoy en día, el director artístico de la marca, Hedi Slimane, reafirma el espíritu de la elegancia parisina en los talleres del número 16 de la rue Vivienne. Sus diseños de «alta costura», combinados con los accesorios y con la línea prêt-à-porter, muestran la influencia de la meticulosa artesanía francesa en el armario de Celine. para celebrar este legado, vuelve el monograma «triomphe»: símbolo de la casa Celine desde 1971.


Le Twist by Celine

La firma irrumpió en el panorama de la moda de los años 2000 como antítesis de lo anteriormente visto. Céline presentó looks simples, racionales y prácticos que hablaban del poder de la mujer y de su independencia, no de seducción.

Así nace el estilo Phoebe Philo: siluetas holgadas y materiales nobles, looks nunca exuberantes en los que la comodidad, la precisión y la libertad de movimientos son los protagonistas de las formas y de los materiales. Sobriedad y lujo escapando de la vulgaridad y la ostentación. 

Ella misma explicó en numerosas ocasiones que sus creaciones se diseñaban pensando en la vida cotidiana de las mujeres, en su trabajo y en su pertenencia al mundo de hoy, no en su sexualidad.

Céline volvió a colocar el término “minimal” en el centro de la moda con enérgicos abrigos oversize, gruesos jerséis y pantalones amplios que enamoraron al mundo entero. 

Los accesorios de la nueva línea de la Maison se han impuesto también de inmediato en el panorama de la moda. Precisión en la forma, perfección de ejecución y calidad indiscutible. Cada bolso de la firma se ha convertido en un objeto altamente codiciado. 

Céline ha sido la encargada de dotar de nuevos aires a la moda femenina presentando creaciones únicas y fuertes looks que visten a la mujer de hoy. Una prestigiosa firma de lujo que hoy es fuente de inspiración y ha impulsado novedosas tendencias en el sector.